La salud el principal de los derechos

Desde que el hombre existe ha luchado por sus derechos, sin embargo, las naciones más avanzadas, supuestos paladines del desarrollo son los que más obstaculizan el progreso de los menos favorecidos.

Hace más de 2 500 años el esclavo Espartaco tuvo que ponerse al frente de 120 000 hombres para buscar el elemental derecho a la libertad pero no fue hasta hace solo 64 años que la humanidad adoptó un documento oficial que en 30 artículos recoge los llamados Derechos Humanos básicos.

Lo que la ONU no ha podido lograr es que eso se cumpla; hay pactos y protocolos internacionales, que parecen escritos para ser violados. Fue la Revolución Francesa, que el 26 de agosto de 1768 que realizó la histórica Declaración de los Derechos de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, no obstante, 244 años después el gobierno de los Estados Unidos de América les niega a los cubanos el elemental derecho a la salud, por su ilegal bloqueo económico y comercial.

El principal derecho enarbolado por los franceses fue a la vida, mientras que en una segunda generación, asumida con la revolución industrial está el derecho a la salud, que fuera incluido por México en su Constitución en 1917.

Cuando Fidel Castro Ruz tuvo que comparecer ante los tribunales de la república mediatizada, para rendir declaración por los sucesos del cuartel Moncada, en su acusadora alocución se pronunció sobre el derecho a la salud de todos los cubanos.

Ese derecho le fue devuelto al pueblo a partir del triunfo de 1959 y una muestra de ellos es el sistema de atención sanitaria desarrollado por Cuba en el último medio siglo que alcanza a países en varios continentes.

Una muestra probatoria es que Pinar del Río, que en el capitalismo exhibía la supuesta tasa de mortalidad infantil – en una insegura estadística- de 60 por cada mil nacidos vivos menores de un año, cerró el 2011 con 3,9 que constituye envidia hasta para países desarrollados.

Hoy día, en el momento de la redacción, esa misma provincia tiene un índice de bajo peso al nacer de 4,6 por ciento, inferior a la media nacional del país y no exhibe muertes maternas.

Para mantener la Educación, la Salud y otras actividades sociales el país destinó este año 17 mil 347 millones 800 mil pesos como parte de la política para favorecer la calidad de vida y bienestar social de sus habitantes. Y todo el mundo debe saber que los servicios de salud son totalmente gratuitos y cercanos a los lugares de residencia.

Pero no todo es felicidad, el bloqueo de las autoridades norteamericanas por más de medio siglo impiden que el país pueda importar materias primas, medicamentos, instrumental y equipos producidos por firmas norteamericanas o que procedan de otros países, pero tengan componentes estadounidenses.

Y en la lista de los NO está:

No se ha podido obtener el kit de la firma VITRO GEN para la detección del coronavirus causante de la Neumonía Atípica (SARS).

-No se han podido comprar las fuentes de isótopos radioactivos Ir-192 con la cual se aplican las radiaciones en los tratamientos para erradicar los tumores cancerígenos.

-No se ha podido adquirir el equipamiento necesario para la renovación tecnológica, especialmente en los hospitales Clínico-Quirúrgicos, Generales, Pediátricos y Obstétricos de las cabeceras provinciales.

-No se puede comprar medicamentos, material gastable y piezas de repuesto para los equipos, sobre todo aquellos destinados a servicios de urgencias, unidades de terapia y unidades quirúrgicas.

- No se puede renovar el parque de ambulancias del país por falta de piezas.

Las empresas productoras de equipos y reactivos para diagnósticos son, en el 70 por ciento de los casos, de propiedad norteamericana. Como consecuencia de ello, los insumos necesarios para el trabajo de los laboratorios clínicos deben ser importados del mercado europeo, a un precio muy superior.

El presupuesto destinado a la compra de recursos para el control del mosquito Aedes Aegypti es 3 793 994 dólares, y la adquisición de estos recursos en el mercado norteamericano hubiera representado un ahorro de 758 798, pero a Cuba no lo venden.

Pero no solo en lo material, también se han denegado las licencias a organizaciones no gubernamentales que brindan colaboración a Cuba con el envío de recursos destinados a las investigaciones y la docencia.

En el periódico Granma leíamos, "La firma norteamericana "Rashkind" produce un catéter denominado "catéter balón" utilizado en la fetostomía, procedimiento pediátrico de gran complejidad. Cuba, al no poder comprarlo en los Estados Unidos, tiene que importarlo de Canadá, provocando que el precio de 110.00 dólares por unidad se incremente a185.00 dólares, sin contar el costo de transportación.

"La Fiscalía Federal, bajo la dirección del Departamento de Justicia de Estados Unidos, declaró culpable al ciudadano canadiense James Sabzali y a los estadounidenses Donald E. Brodie y Stefan E. Brodie, ejecutivos de la compañía Purolite por "violar el bloqueo contra Cuba". Tras cinco años de investigaciones sobre sus negocios con nuestro país, el Sr. Sabzali podría enfrentar hasta 205 años de cárcel.

"Cuba no puede adquirir tecnologías de punta que controla Estados Unidos como la Diálisis Peritoneal Continua Ambulatoria para el Programa de Atención al Paciente Renal Crónico, inmunosupresores modernos como el FK506, el Micofenolato Mofetil, y los Dializadores con membranas sintéticas, entre otras tantas."

Y la lista de hechos es extensa, algunas Compañías como Baxter, Healthcare, Drake Willock, Vitalmex Interamericana S.A., proveen sus productos en mercados cercanos con alto desarrollo tecnológico. Sin embargo, tienen prohibido vender equipos, materiales gastables y accesorios a Cuba.

Pero aún así los cubanos gozan del derecho a la salud, porque cuentan con el principal componente, alto número de personal calificado técnica y científicamente y con dosis de humanismo que no puede ofrecer la medicina mercantilista del capitalismo.

Y todo esto es motivo para que los cubanos celebren este viernes el día universal de los derechos humanos, porque tienen salud para hacerlo.

Desde que el hombre existe ha luchado por sus derechos, sin embargo, las naciones más avanzadas, supuestos paladines del desarrollo son los que más obstaculizan el progreso de los menos favorecidos.

Hace más de 2 500 años el esclavo Espartaco tuvo que ponerse al frente de 120 000 hombres para buscar el elemental derecho a la libertad pero no fue hasta hace solo 64 años que la humanidad adoptó un documento oficial que en 30 artículos recoge los llamados Derechos Humanos básicos.

Lo que la ONU no ha podido lograr es que eso se cumpla; hay pactos y protocolos internacionales, que parecen escritos para ser violados. Fue la Revolución Francesa, que el 26 de agosto de 1768 que realizó la histórica Declaración de los Derechos de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, no obstante, 244 años después el gobierno de los Estados Unidos de América les niega a los cubanos el elemental derecho a la salud, por su ilegal bloqueo económico y comercial.

El principal derecho enarbolado por los franceses fue a la vida, mientras que en una segunda generación, asumida con la revolución industrial está el derecho a la salud, que fuera incluido por México en su Constitución en 1917.

Cuando Fidel Castro Ruz tuvo que comparecer ante los tribunales de la república mediatizada, para rendir declaración por los sucesos del cuartel Moncada, en su acusadora alocución se pronunció sobre el derecho a la salud de todos los cubanos.

Ese derecho le fue devuelto al pueblo a partir del triunfo de 1959 y una muestra de ellos es el sistema de atención sanitaria desarrollado por Cuba en el último medio siglo que alcanza a países en varios continentes.

Una muestra probatoria es que Pinar del Río, que en el capitalismo exhibía la supuesta tasa de mortalidad infantil – en una insegura estadística- de 60 por cada mil nacidos vivos menores de un año, cerró el 2011 con 3,9 que constituye envidia hasta para países desarrollados.

Hoy día, en el momento de la redacción, esa misma provincia tiene un índice de bajo peso al nacer de 4,6 por ciento, inferior a la media nacional del país y no exhibe muertes maternas.

Para mantener la Educación, la Salud y otras actividades sociales el país destinó este año 17 mil 347 millones 800 mil pesos como parte de la política para favorecer la calidad de vida y bienestar social de sus habitantes. Y todo el mundo debe saber que los servicios de salud son totalmente gratuitos y cercanos a los lugares de residencia.

Pero no todo es felicidad, el bloqueo de las autoridades norteamericanas por más de medio siglo impiden que el país pueda importar materias primas, medicamentos, instrumental y equipos producidos por firmas norteamericanas o que procedan de otros países, pero tengan componentes estadounidenses.

Y en la lista de los NO está:

No se ha podido obtener el kit de la firma VITRO GEN para la detección del coronavirus causante de la Neumonía Atípica (SARS).

-No se han podido comprar las fuentes de isótopos radioactivos Ir-192 con la cual se aplican las radiaciones en los tratamientos para erradicar los tumores cancerígenos.

-No se ha podido adquirir el equipamiento necesario para la renovación tecnológica, especialmente en los hospitales Clínico-Quirúrgicos, Generales, Pediátricos y Obstétricos de las cabeceras provinciales.

-No se puede comprar medicamentos, material gastable y piezas de repuesto para los equipos, sobre todo aquellos destinados a servicios de urgencias, unidades de terapia y unidades quirúrgicas.

- No se puede renovar el parque de ambulancias del país por falta de piezas.

Las empresas productoras de equipos y reactivos para diagnósticos son, en el 70 por ciento de los casos, de propiedad norteamericana. Como consecuencia de ello, los insumos necesarios para el trabajo de los laboratorios clínicos deben ser importados del mercado europeo, a un precio muy superior.

El presupuesto destinado a la compra de recursos para el control del mosquito Aedes Aegypti es 3 793 994 dólares, y la adquisición de estos recursos en el mercado norteamericano hubiera representado un ahorro de 758 798, pero a Cuba no lo venden.

Pero no solo en lo material, también se han denegado las licencias a organizaciones no gubernamentales que brindan colaboración a Cuba con el envío de recursos destinados a las investigaciones y la docencia.

En el periódico Granma leíamos, "La firma norteamericana "Rashkind" produce un catéter denominado "catéter balón" utilizado en la fetostomía, procedimiento pediátrico de gran complejidad. Cuba, al no poder comprarlo en los Estados Unidos, tiene que importarlo de Canadá, provocando que el precio de 110.00 dólares por unidad se incremente a185.00 dólares, sin contar el costo de transportación.

"La Fiscalía Federal, bajo la dirección del Departamento de Justicia de Estados Unidos, declaró culpable al ciudadano canadiense James Sabzali y a los estadounidenses Donald E. Brodie y Stefan E. Brodie, ejecutivos de la compañía Purolite por "violar el bloqueo contra Cuba". Tras cinco años de investigaciones sobre sus negocios con nuestro país, el Sr. Sabzali podría enfrentar hasta 205 años de cárcel.

"Cuba no puede adquirir tecnologías de punta que controla Estados Unidos como la Diálisis Peritoneal Continua Ambulatoria para el Programa de Atención al Paciente Renal Crónico, inmunosupresores modernos como el FK506, el Micofenolato Mofetil, y los Dializadores con membranas sintéticas, entre otras tantas."

Y la lista de hechos es extensa, algunas Compañías como Baxter, Healthcare, Drake Willock, Vitalmex Interamericana S.A., proveen sus productos en mercados cercanos con alto desarrollo tecnológico. Sin embargo, tienen prohibido vender equipos, materiales gastables y accesorios a Cuba.

Pero aún así los cubanos gozan del derecho a la salud, porque cuentan con el principal componente, alto número de personal calificado técnica y científicamente y con dosis de humanismo que no puede ofrecer la medicina mercantilista del capitalismo.

Y todo esto es motivo para que los cubanos celebren este viernes el día universal de los derechos humanos, porque tienen salud para hacerlo.