George W. Bush decidió combatir al terrorismo con más terrorismo

Dice un viejo proverbio que "un clavo saca otro" y los norteamericanos se lo han creído a pie juntillas, desde que George W. Bush decidió combatir al terrorismo con más terrorismo, forma de lucha más ilegítima porque muchas veces las víctimas son inocentes, sin intereses en el conflicto o con ellos, pero ajenos a la lucha. Bush no inventó el terrorismo, él sencillamente lo debe haber leído en viejas crónicas de su país o en las leyendas de familia, porque su abuelo mucho tuvo que ver con formas violentas en su quehacer, incluso con apoyo al nazismo alemán en la época en que buscaba fondos en América. El terrorismo es la secuencia de actos violentos para amedrentar y dañar a un enemigo, pero si lo hace un gobierno entonces es terrorismo de estado. Los políticos estadounidenses son verdaderos maestros en ese tipo de lucha, para eso se apoyan en su gran prensa que fabrica estados de opinión entre sus propios ciudadanos y en el resto del mundo, utiliza los centros de inteligencia militar para penetrar la información de otros, sabotean las economías o las políticas y cuando todo esto les falla usa la CIA, que además de "inteligencia" es especialista en trabajo sucio, algo que debemos interpretar como terrorismo. Cuba ha sido un escenario de ensayo para el terrorismo de estado de los norteamericanos: usaron desde los inicios de la Revolución todas las formas de amedrentar a la población, desde bandas armadas, grupos para atacar puertos pesqueros y embarcaciones en el mar, secuestros, atentados a dirigentes, asesinatos de diplomáticos, incendios, bombas de todo tipo, propaganda de guerra o mal intencionada como la que provocó la Operación Peter Pan, entre otras. De todo este listado hay ejemplos para mencionar, lo mismo a nivel de país que de provincia, pero ojo, los ánimos se están caldeando y el presidente Obama a cada rato hace promesas y la gente de la Florida se las cree y esos grupos de acciones violentas están activos y no vacilarían en buscar ingenuos que los secunden dentro del país. Como diría un viejo amigo, "el horno no está para panecillos", ya Miami está convulso al saber que René tendrá que permanecer tres años más allí, lógicamente amigos de Cuba también se moverán, porque en este ajedrez los jugadores no son tontos. Bush trató de crear una especie de división entre terrorismo bueno -el de ellos- y terrorismo malo, -el de los otros-, algo imposible porque cuando quieres perturbar el orden, asesinar y destruir, realmente no puede ser bueno. ¿A quién se le ocurre que un individuo que vuele un avión civil pueda ser bueno?; solo lo será en la mente de un analista político norteamericano de extrema derecha o en la de Ileana Ros-Lehtinen. Está claro que el terrorismo y los terroristas son malos y podemos traer otro viejo refrán "si vuela como pato, canta como pato y camina como pato, es pato", entonces el Míster President debe tener cuidado, porque aunque tenga un Nobel de la Paz, debe saber con quien se junta.